Si eres un amante de la naturaleza y la aventura, estás en el lugar adecuado. Descubre con nosotros las mejores rutas de senderismo en Madrid, una oportunidad única para escapar del bullicio urbano y explorar también su belleza natural. Madrid tiene mucho que ofrecer a los entusiastas del senderismo. ¡Prepárate para calzarte las botas y descubrir Madrid de una manera completamente nueva!
1. Camino Schmidt
Una de las rutas de senderismo en Madrid más transitadas, incluso por aquellos que la desconocen. Se encuentra en el Puerto Navacerrada, donde todo buen dominguero madrileño ha ido a pasar la mañana alguna vez, más aún si ha nevado. Toma el nombre del senderista de origen austriaco que marcó la ruta en 1926.
Este camino clásico de la sierra del Guadarrama comienza en la pista de esquí del Escaparate, se dirige hacia el Puerto de la Fuenfría, cruza el bosque de la umbría de los Siete Picos y desde ahí hay que descender por la calzada romana hasta Fuenfría de Cercedilla. Es una marcha de dificultad media, muy accesible y se puede llegar en tren desde Atocha en la línea C8 de Cercanías de Madrid.
Distancia: 16 km
Duración: 3 horas.
2. El Cancho de la Cabeza en Patones
Este recorrido merece la pena por varios motivos, además de salir al campo a despejarnos. Patones de Arriba es uno de los pueblos más bonitos de la sierra madrileña y la subida al Cancho de la Cabeza tiene una vista panorámica del embalse de El Atazar que merece el esfuerzo que supone el desnivel de la ruta.
Distancia: 12,5 km
Duración: 4 horas.
3. Cañones del río Lozoya
Los cañones del río Lozoya son posiblemente uno de los caminos más bonitos y menos transitados de las rutas de senderismo en Madrid. Es una marcha sencilla, pero con bastante altura en algunos tramos. La senda comienza en los restos de la Presa del Pontón de la Oliva, la más antigua de la Comunidad y ya en desuso.
En esta zona también se puede practicar la escalada gracias a los acantilados del río Lozoya. Como bien indica el nombre, la ruta sigue el curso del río, aunque a veces también nos topamos con el Jarama. Entre ambos ríos hay un pequeño desvío interesante para visitar el yacimiento romano de la Dehesa de la Oliva, un plus para aquellos a quienes les interese la historia.
Distancia: 8 km
Duración: 2 horas.
4. Laguna del Campillo
La laguna de Campillo se encuentra en el denominado Parque del Sureste, a 20 kilómetros del centro de Madrid, en la localidad de Rivas Vaciamadrid. Es una excursión fácil y perfecta para niños. Tiene una laguna artificial que fue creada por las filtraciones de la extracción de yeso. Se encuentra en un humedal en el entorno del río Manzanares y desemboca en el Jarama. Aunque llegó a ser campo de cultivo, ahora es un área protegida por su diversidad floral y de elevada importancia para la fauna autóctona.
Distancia: 4,5 km
Duración: 2 horas.
5. Las Cárcavas de Pontón de la Oliva
La ruta de las Cárcavas también comienza en la presa de Pontón de la Oliva, está justo en la frontera entre la Comunidad de Madrid y Guadalajara. Tiene dos rutas: una corta, de unas dos horas, con una gran cuesta inicial, pero más directa a las Cárcavas, y otra más larga y circular, pensada para pasar el día. Este paisaje protegido, que también podemos encontrar en las Barrancas de Burujón, se forma por la erosión remontante del agua en las tierras con poca sujeción vegetal.
Distancia: 12 km
Duración: 3:30 horas.
6. Senda ecológica de Canencia
La senda empieza en el Puerto de Canencia, de ahí su nombre, y se sitúa en la Sierra Norte de Madrid. Toda la ruta está muy bien señalizada, perfecta para pasar el día y con una zona para comer. Uno de sus grandes atractivos es la variada vegetación, el rey de este bosque es el abedul, que es más común en el centro y norte de Europa. También hay acebo (muy popular en Navidad) y tejo, que debido a su singularidad y escasez está especialmente protegido.
Distancia: 6 km
Duración: 1:45 horas.
7. Ruta al bosque de la Herrería (la silla de Felipe II)
El bosque de la Herrería es una ruta muy sencilla, con mucha historia y tradición. Tras una inclinada subida se llega a la silla, horadada en el granito, desde la que supuestamente el rey Felipe II vigilaba las obras de El Escorial. La realidad es que es un altar vetón modificado en los últimos siglos. Algo de religioso sigue teniendo el camino, en el que cada segundo domingo de septiembre hay una procesión de la Virgen tirada por bueyes hasta la Ermita de la Virgen de Gracia.
Distancia: 4,5 km
Duración: 2 horas.
Fuente: https://madridsecreto.com/